Masticar o beber: la esencia del cacao, del haba a la tableta y del haba a la taza ¡Disfrute de nuestro cacao en todas sus formas!✨Bebida: Mézclelo con 250 ml de agua caliente (máx.
65°C para preservar toda su bondad) y añade especias al gusto: guindilla, sal, cardamomo, canela, cúrcuma, jengibre... Para una textura suave y cremosa, utiliza una chocolatera o un espumador.🌱 Para suavizar su amargor, añade un toque de leche vegetal, sirope de coco, yacón o lúcuma.
También puedes enriquecerlo con superalimentos como maca, moringa, camu, plátano en polvo, mango en polvo u hongos adaptógenos. Déjalo enfriar para convertirlo en una base perfecta para tus smoothies y batidos.🍫Para crujirlo: Disfrútalo tal cual, en cuadradito, y deja que cada trozo se deshaga en la boca para apreciar plenamente su textura y sabores.
Una experiencia pura, del grano a la barra. Triturado, realza tus granolas, smoothie bowls, yogures y postres. También puedes introducirlo en tus pastas, galletas, brownies, pralinés caseros, coulis y barritas caseras para darle un auténtico toque gourmet.🌀 Un ritual para ti: Beber o crujir cacao es algo más que degustarlo, es un momento para ti, un ritual de conexión. Saborearlo con plena conciencia, antes de una meditación, una práctica de yoga, un tratamiento, un baile, un momento creativo o deportivo. O simplemente déjate llevar por el puro placer del momento.Lo esencial reside en la calidad de presencia que te ofrezcas con cada degustación. 🌿✨